Thursday, December 10, 2015

No renunciemos a nuestra bendición, por satisfacer una necesidad temporera…!


Esaú vendió a su hermano Jacob, su primogenitura y bendición,  por un plato de lentejas. Por satisfacer una necesidad temporera, tomó en poco algo tan importante como la bendición que Dios le había entregado, y aún más, la de toda su descendencia.  Llegado el momento de presentarse ante su Padre, no tuvo la valentía de decirle con sinceridad la verdad de lo que había hecho. Acusó a su hermano de haberse apoderado de su primogenitura, y haber tomado su bendición. Tuvo la memoria muy corta para recordar que él mismo la entregó, y la vendió por un plato de lentejas. Hizo un pacto verbal para negociarla. Y dice la Palabra que “clamó amargamente, suplicando que le bendijera a él también”.  (Gn. 25, 27)

Por eso debemos ser cuidadosos en conservar y guardar nuestra salvación y bendición .con denuedo. Porque el enemigo está al acecho como león que busca a quien devorar con confusión, distracción, y toda clase de mentira que logre desenfocarte de tu bendición para que renuncies a ella y la pierdas (1Pedro 5:8).

“Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracias de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados; no sea que haya algún fornicario, o profano como Esaú, que por una sola comida vendió su primogenitura. Porque ya sabéis que aún después, deseando heredar la bendición, fue desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas” (Hebreos 12:15-17).

Ciertamente la gracia es un regalo inmerecido de Dios. Es por gracia! Y nuestro Señor es un Dios de amor, misericordia, y muchas oportunidades. Pero si hay algo que debe ser terrible es ser desechado por dejar de alcanzar su gracia. Sí podemos perder la salvación. Debemos cuidarla y ocuparnos de ella con temor y temblor (Filipenses 2:12). Con obediencia a la Palabra de Dios y con sabiduría, valorándola y honrándola. No es el anhelo del corazón de nuestro Padre, todo lo contrario. Pero no nos obliga, es nuestra decisión! Se trata de PERMANECER en Él (Juan 15:7). “Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes, afirma el Señor, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza” (Jeremías 29:11). Esa es Su Voluntad para nuestras vidas!

Sunday, July 26, 2015

Has hecho tú el pacto, para desatar tu bendición?

Has hecho tú el PACTO que sellará tu bendición? 

Ya muchos de ustedes conocen gran parte de nuestro testimonio. Sobretodo el suceso de mi salvación, tras un período de 6 años de procesos y dificultades que me hundieron en una vida pecaminosa despiadada, por la cual muchas vidas, (las cuales siempre he amado) fueron afectadas. Sobretodo la de mi hija y esposa. 

La palabra fue "ese es el hombre que yo (Jehová de los ejércitos) es escogido para ti. Y a ti yo lo devolveré limpio y libre".
 Gracias al Dios Todopoderoso, por haber puesto en mi vida, principalmente un abuelo, que por largos años, día a día y por largas horas, clamó y pactó por mi vida desde mi llegada al mundo. Por una madre, que continuó con el legado de su padre, (mi abuelo) y reafirmó el pacto ya establecido. Pero sobretodo, por una esposa, a la cual una sola promesa, dada en SOLAMENTE UNA OCASIÓN, fue suficiente para someterse a 6 años de oración e Intercesión por la salvación de mi vida. La palabra fue "ese es el hombre que yo (Jehová de los ejércitos) es escogido para ti. Y a ti yo lo devolveré limpio y libre". 


Consumido ese gran milagro, luego de 6 largos años, solo restaba algo para que se destara todo el poder restaurador y la bendición que el Señor ya había designado para nuestras vidas. A los pocos días de haberme reconciliado con el Señor, y tras un sencillo pero muy lindo encuentro con quien para aquel entonces era mi ex-esposa, en la intimidad de mi carro le dije al Señor; "Padre, yo se que he agotado toda oportunidad de reconciliación con Deborah. No soy digno de su presencia en mi vida, y mucho menos de su amor. Pero, si esta en tu voluntad, y solo si tu entiendes que es correcto, o pueda yo merecerlo, te pido yo una última oportunidad. Si tu me devuelves a mi esposa, a mi familia, alabaré tu nombre como nunca antes nadie te haya alabado. Te honrare, y haré tu voluntad todos los dias de mi vida. Pelearé por ti, por tu obra. Amaré y honraré a mi esposa por siempre...... " Finalmente se consumaba!

Pero, si esta en tu voluntad, y solo si tu entiendes que es correcto, o pueda yo merecerlo, te pido yo una última oportunidad. Si tu me devuelves a mi esposa, a mi familia, alabaré tu nombre como nunca antes nadie te haya alabado. Te honrare, y haré tu voluntad todos los días de mi vida.
 
En ese preciso momento todo tomaba el orden que Dios había previsto para nuestras vida. Sin yo saber lo que hacia," gracias a Dios por el Espíritu Santo, que nos guía " esas palabras representaban mi pacto, como sacerdote de mi casa para con el Señor. Con ello se sellaba la palabra y la promesa que el Señor había dado a mi esposa hacía 6 años atrás. 

En menos de 2 semanas, el Señor desencadenó todo su poder restaurador sobre nuestras vidas. Todo herida del corazón fue sanada, y todo pasado quedaba atrás. En menos de 2 semanas, el Señor devolvio todo a nuestras vidas. 

Tú, que por años has clamado por la salvación de aquel que amas. Tú, que promesas y palabra has recibido, para la restauración de tu matrimonio y tu familia. Has hecho tú, tu pacto con el Señor? Te has preparado para recibir la bendición que el Señor tanto desea darte? Has puesto tú, tu vida y corazón en el orden correcto, para recibir la bendición, y no dañar con heridas aun no sanadas y entregadas al Todopoderoso, el milagro que el Señor quiere dar a tu vida? 

Es hora de reflexionar, y preguntar a Dios que debemos poner en orden, para recibir esa bendición. Todo habra de desencadenarse con TU PACTO! 

Asi declaramos quedará hecho en tu vida; en el nombre de Jesús!